Cuando piensas en auriculares “baratos”, normalmente esperas algo justito, funcional y ya está. Pero los Baseus Bass BP1 Pro vienen precisamente a romper esa idea. Y lo hacen a lo grande: buen diseño, cancelación de ruido configurable, modo transparencia y un sonido que, sinceramente, no debería costar lo que cuestan. Vamos por partes, porque estos pequeños tienen mucha miga.
Un diseño que da más de lo que promete
Aunque están fabricados en plástico, la sensación en mano no es para nada barata. El acabado está muy bien trabajado, las líneas son limpias y el estuche tiene ese toque de producto cuidado que solemos ver en gamas más altas. No vas a sentir que llevas un gadget “low-cost”, y eso ya es un plus enorme. Baseus ha puesto mimo en el diseño, y se nota.
Comodidad y resistencia para usar todo el día
Son in-ear, así que el ajuste depende de cada persona, pero en general se encajan muy bien. Incluso en sesiones largas no se hacen molestos, lo cual siempre agradece el oído. Además, al tener resistencia IP55 puedes usarlos para entrenar, caminar bajo una lluvia ligera o lidiar con el calor sin preocuparte. Son auriculares para el día a día, sin miedos.
Conectividad moderna y batería que aguanta
Con Bluetooth moderno (de los nuevos, sí), la conexión es rápida y estable. Nada de microcortes ni historias raras.
Pero lo mejor es la batería: los auriculares aguantan horas y horas sin despeinarse, y con el estuche puedes llegar a más de dos días de uso normal sin cargar. Si usas la cancelación activa, la autonomía baja un poco, pero aun así sigue siendo muy buena. Y con la carga rápida, diez minutos enchufados te salvan una mañana entera.
Un sonido que sorprende (y mucho)
Aquí viene lo inesperado: el sonido es muy bueno para su precio. Tienen LDAC, el codec de audio de alta resolución, así que si tienes un móvil compatible vas a notar un salto importante en detalle.
La ecualización se puede ajustar, y Baseus ofrece dos perfiles principales: uno pensado para graves potentes y otro más equilibrado. Lo mejor es que puedes cambiarlo desde la app y adaptarlo a lo que escuchas. ¿Eres de música épica para sentirte como un Jedi entrando en batalla? Pues tienen grave para eso. ¿Prefieres voces claras para podcasts? También cumplen.
Cancelación de ruido: configurable y bastante potente
La cancelación de ruido es uno de los puntos donde más brillan. No solo funciona bien, sino que puedes elegir diferentes modos según el entorno: interior, exterior, transporte…
En la práctica, reduce el ruido de forma muy consistente, sobre todo en frecuencias bajas y medias. Obviamente no compite con los gigantes del sector, pero para su precio lo hace sorprendentemente bien.
El modo transparencia también está ahí, y cumple de forma sólida. No es el modo más natural del mercado, pero para escuchar una conversación rápida, cruzar la calle o estar atento a lo que pasa alrededor va perfecto. Lo que tú comentabas: no está hiperoptimizado, pero funciona muy bien para lo que necesitamos.
Controles y app: útiles, aunque con margen
Los controles táctiles responden bien, aunque requieren un par de días de acostumbrarse para no activar algo sin querer. Desde la app puedes cambiar modos, ajustar la ecualización y revisar el estado de batería.
Eso sí, la app aún tiene cosas que pulir: algunos ajustes no son tan intuitivos y la ecualización puede afectar al volumen general. Nada grave, pero es un área mejorable.
Llamadas y micrófono
Con varios micrófonos dedicados al aislamiento de voz, las llamadas se escuchan bien en la mayoría de situaciones. Si estás en un lugar con mucho ruido, la calidad puede variar, pero en general funcionan de manera más que aceptable. Son buenos para videollamadas rápidas o para hablar mientras caminas.
¿Y si quieres jugar? Tienen modo gaming
Incluyen un modo de baja latencia que reduce bastante el retardo entre la acción en pantalla y lo que escuchas. No es perfecto, pero para juegos móviles va genial. Si eres de echar unas partidas al Genshin o al COD Mobile, vas a notar que la sincronización mejora.
Cosas a considerar
No todo es perfecto, y conviene mencionarlo:
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El modo transparencia no es el más natural del mercado.
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La app puede pulirse un poco más.
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El micrófono, aunque bueno, no llega a nivel “pro”.
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Algún usuario comenta que a veces se oye un pitido ocasional.
Son detalles menores, pero ahí están.
Los Baseus Bass BP1 Pro son ese producto que no esperas que te sorprenda… y lo hace. Se sienten mejor de lo que cuestan, suenan mejor de lo que pagas y ofrecen funciones que normalmente solo vemos en gamas más altas.
Me quedo especialmente con su ANC configurable, su sonido con LDAC y la sensación de buena construcción a pesar del material. No son perfectos, pero sí tremendamente equilibrados. Para el usuario medio —y para más de un friki del audio que quiere algo económico para el día a día— son una compra redonda.
Si tuviera que resumirlos en una frase sería:
“Lo que cuestan no tiene sentido para lo que ofrecen.”
Los Baseus Bass BP1 Pro son una opción muy sólida para quien busca auriculares completos, cómodos y con funciones avanzadas sin gastar una fortuna. Ofrecen buena cancelación de ruido, sonido competente, autonomía muy holgada y una construcción digna de productos más caros. Si buscas buen rendimiento sin dejarte el sueldo, son una apuesta segura.
