pantallas

Durante los últimos 30 años hemos podido ver la evolución de múltiples aparatos tecnológicos, pero no todos nos han impactado de la misma manera que los teléfonos móviles. En un principio, éstos nacieron para poder comunicarnos de forma sencilla y desde cualquier parte, pero hoy en día se han convertido en pequeños ordenadores que nos ayudan a realizar un sinfín de tareas. Por ello, con cada vez más usuarios comunicándose mediante aplicaciones y usando sus smartphones para navegar, las empresas han aumentado el tamaño de las pantallas hasta convertirlas en pequeñas tabletas. Seguidamente, veremos cuáles son los pros y los contras de esta tendencia que no parece tener freno.

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Más espacio y mejor visibilidad

Por una parte, debemos tener presente que cuanto más grande sea la pantalla de nuestro teléfono, mas facilidad tendremos para ver contenidos sin tener que forzar la vista. Este punto es especialmente útil si se tienen problemas de visión o se quiere realizar actividades que conllevan observar la pantalla durante un largo periodo. Por ejemplo, aquellos que adoren la fotografía tienen la oportunidad de visualizar con mayor detalle las imágenes que captan, así que para ellos una pantalla como la del Samsung Galaxy S20 Ultra, que tiene 6,9 pulgadas, puede ser ideal. Además, este teléfono dispone del denominado “Space Zoom 100X”, gracias al cual se pueden hacer excelentes fotografías desde lejos.

Otro dispositivo de relevancia para los aficionados a la fotografía es el Huawei P40 Pro, cuya pantalla tiene 6,58 pulgadas. En este caso, el dispositivo cuenta con un zoom menor al anterior, ya que es de 50x, pero se debe destacar el magnífico postprocesado de las fotografías. Del mismo modo, se pueden realizar espectaculares vídeos para subirlos a alguna red social o guardarlos como recuerdo. Para exprimir todo el potencial de estos móviles, también tenemos la opción de descargar aplicaciones adicionales que mejorarán nuestro trabajo, como Snapseed, que permite ajustar la perspectiva o el tamaño de las fotos, o VSCO Cam, que es perfecta para modificar la temperatura de las imágenes.

Por otro lado, gracias a las notables pantallas de dichos dispositivos y a los lápices como los Stylus activos, que permiten realizar trazos de notable precisión, es posible convertir nuestros teléfonos en lienzos para realizar obras de arte o simplemente escribir nuestros pensamientos como si de una libreta se tratase. Para ello, podemos adquirir aplicaciones como Ibis Paint X, que presume de tener más de 80 millones de descargas. Debido a sus cientos de recursos, es uno de los softwares más populares entre los aficionados a la pintura, ya que posibilita resultados profesionales.

En el caso de querer leer algún tipo de texto o disfrutar de contenido multimedia como vídeos o películas, también se agradece una pantalla de gran tamaño, al igual que si se quiere utilizar la función multitarea que se incluye en la mayoría de los smartphones actuales. Asimismo, múltiples usuarios aprovechan las mencionadas pantallas para convertir su teléfono en una videoconsola, algo que no debe sorprendernos si prestamos atención a teléfonos como Realme X3 SuperZoom. El dispositivo, que tiene una pantalla de 6,6 pulgadas, también incluye una aplicación llamada “Espacio de juegos”, la cual sirve para gestionar de forma más eficiente los títulos que descargamos.

Incomodidad y dificultad de uso

Por el contrario, una pantalla grande puede resultar un estorbo por distintas razones, puesto que no siempre se necesita un teléfono tan voluminoso. Por ejemplo, si los aficionados deciden descargar aplicaciones como Candy Crush Saga en Google Play, probablemente tengan suficiente con una pantalla de 5 pulgadas. Lo mismo sucede con juegos de azar como el blackjack, ya que como detalla Betway, solo se reparten dos cartas iniciales y una más posteriormente si se solicita. Por esta razón, una pantalla de 4 o 5 pulgadas ya permite visualizar correctamente las jugadas. A la hora de jugar a otros títulos como tragaperras o la ruleta, también disponibles en dicho casino, tampoco es preciso una pantalla de entre 6 y 7 pulgadas.

El considerable tamaño de los dispositivos comentados también es problemático para guardarlos, ya sea en el bolsillo o en un pequeño bolso, por lo que nos obliga a llevarlos en la mano o a buscar otra forma de transportarlos. Además, estos teléfonos son cada vez más complejos de manejar con una sola mano, lo cual los convierte en aparatos menos prácticos a la hora de realizar tareas sencillas como responder un mensaje o navegar por una web. También se debe considerar que dichas pantallas consumen más batería, así que nos fuerzan a cargar el teléfono de forma más habitual que antaño. En conclusión, los teléfonos con pantallas grandes tienen múltiples ventajas, dado que nos permiten leer o jugar con más comodidad, pero no siempre son necesarias y por lo tanto las compañías deberían ofrecer más opciones en el mercado.

Por Ganix Trejo

Ingeniero técnico industrial con un Máster en Ingeniería en Organización Industrial. Aficionado y curioso en todo lo referente a la tecnología y fotografía.